My real life

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domingo, 6 de marzo de 2016

Como la Torre Eiffel

todos nos hemos sentido solos alguna vez cuando estábamos rodeados de muchísima gente.
No sabíamos que fallaba pero sabíamos que algo no iba bien, que esa soledad era fruto de algo y quizás ese era el problema de todo, no darnos cuenta de que teníamos a mucha gente a nuestro lado que estaba dispuesta a darlo todo pero nosotros no hacíamos más que alejarnos cada vez más de nuestras vidas hasta que desaparecieron.
Y fue en ese momento cuando realmente nos dimos cuenta de lo que habíamos perdido porque no todo el mundo está dispuesto a demostrarnos que nos quiere y está ahí cuando las cosas salgan mal o no vayan como nosotros esperamos.
El problema de querer ser tan fuerte es que a veces olvidamos que la gente cree que no nos vamos a romper nunca, que somos como la Torre Eiffel, una estructura de hierro que se mantiene pase lo que pase pero en realidad no es así, todo el mundo necesita en algún momento de su vida que los demás sepan que también se rompe y tiene derecho a ello.
Y cuando eso pasa sólo necesita un abrazo y alguien que le escuche de verdad, que sepa entender que ha sido demasiado fuerte durante mucho tiempo y que las heridas también pesan en el alma.
Cuando nos sentimos tan solos realmente necesitamos que alguien nos diga que no es así, que todo va a estar bien y que no cometamos la tremenda estupidez de alejarlos de nuestra vida.
El problema está que alejamos a las personas por miedo a ser una carga para ellos, por miedo a perjudicarles y sobre todo por miedo a no ser lo que ellos esperan y decepcionarles.
El problema está en que pensamos demasiado y sentimos muy poco y a veces la felicidad sólo depende de sentimientos y no de la razón.

Recuerda que

Y es que hay veces que no nos damos cuenta de la gran suerte que tenemos por tener a personas que realmente se preocupan por nosotros, da igual el tiempo que lleven con nosotros, entran en tu vida y pum.
No soy de hacer este tipo de cosas y menos tan extensas pero cuando creo que alguien se lo merece de verdad es necesario hacerlo
Te he escrito muchas veces lo importante que eres para mi hermano, te lo he dicho unas mil veces también en persona pero realmente creo que no tienes ni idea de la importancia que tienes en mi vida.
Ganarse mi confianza, aunque parezca mentira, no es tarea fácil porque por desgracia, los años me han enseñado que la confianza es un arma de doble filo y que hay que tener mucho cuidado, pero tú te ganaste mi confianza en poquisimo tiempo y a día de hoy entiendo cada vez más por qué.
No hay momento en el que me hayas fallado, momentos en los que mucha gente desapareció pero tú estuviste ahí y créeme que yo esas cosas no las olvido jamás.
Me has cuidado mil veces cuando me he puesto mala, me has protegido como si fuera tu hermana y siempre me has hecho reír en los momentos difíciles.
He tenido tu apoyo en momentos durísimo que no sabía ni cómo salir y sobre todo siempre he tenido tu cariño y tus abrazos.
A día de hoy eres uno de mis pilares fundamentales porque tiras de mí cuando estoy cayendo y cuando no tengo ganas de nada.
No voy a olvidar esas fiestas contigo en las que haces que se me olvide todo y lo importante sea sólo disfrutar y tampoco voy a olvidar todos los momentos buenos que hemos compartido.
Por todo esto te digo siempre que eres un grande, que eres enorme y que me siento muy afortunada de tener un hermano como tú, porque los amigos como bien sabes son la familia que elegimos y yo no he podido elegir mejor.
Si te escribo todo esto en algo público es para que todo el mundo sepa que eres un tío genial, que deberían conocerte antes de juzgarte por los motivos que sean porque no he conocido mejor persona que tu hermanito y te lo digo de verdad, eres de esas personas que es imposible no cogerlas cariño porque siempre ayudas a todo el mundo, tienes una palabra amable y sobre todo humilde.
Gracias por este tiempo compartido contigo, por las risas, por los piques cuando te metes conmigo y yo salto, por preocuparte siempre por mi, por animarme con tus tonterías cada vez que me ves rayada y en definitiva gracias por ser como eres de verdad.
Y esto no es porque sea una cursi ni nada por el estilo eh jajajaja sino que a las personas que te hacen grande día a día, que te enseñan a ver la vida con otros ojos y que están ahí para darte abrazos cuando todo va mal hay que saber valorarlas y apreciarlas y por eso esta es mi forma de decirte que te quiero muchísimo hermano y que siempre vas a poder contar conmigo para lo que quieras porque los hermanos son para toda la vida.
Eres genial y no olvides nunca que tienes que  sonreír porque eres una de las personas más fuertes que conozco.
Las torres altas no se derrumban porque nacen como rascacielos para mantenerse en pie.
Gracias por absolutamente todo hermanuchi.
Pase lo que pase y le pese a quien le pese 💪🏼
Te quiero muchísimo. ❤️